-Made a wrong turn once or twice. Dug my way out, blood and fire. Bad decisions, that's alright. Welcome to my silly life.-

30 de julio de 2012

We are all mad here.

Un día me puse a dialogar con mi peluche preferido, es un gato rosado y fuxia, la cara explica su demencia con solamente ojearlo, tiene una sonrisa de oreja a oreja y es obeso. Me contaba lo fácil que es su vida de objeto inanimado, no tenía que preocuparse por nadie ni nada, ni siquiera por las necesidades más básicas para sobrevivir. No tenía que sufrir ya que era imposible que le rompan el corazón por no tener sentimientos, tampoco se enojaba con nadie, no lo discriminaban por pensar diferente porque no piensa, no tiene que preocuparse por su salud ni por las enfermedades al carecer todo tipo de sistema en su total no puede enfermarse, tampoco puede pasar hambre y nunca lo van a internar por demente.
Sin embargo me confesó que su deseo más oculto en el alma era ser un humano. Al decirme esto no entendía porqué, a mi forma de ver, el ser humano es la forma de vida más miserable que pudo existir, no puede subsistir en paz, siempre con rencores y venganza, con tendencia a superar a sus hermanos y hermanas. Pero mi amigo me dio una respuesta que cambió mi punto de vista. Al no poder odiar, él tampoco podía amar. Como no sufría, tampoco disfrutaba. Como no se enojaba, tampoco se divertía. No lo discriminaban porque sus hermanos eran exactamente iguales a él. Enfermarse no podía, entonces nunca conoció lo que es sentirse mejor. Estaba demente si, pero no podía disfrutar de su demencia porque todos lo estaban. Él se dio cuenta de todas las cosas hermosas de ser un pequeño humano, algo que nunca me había detenido a pensar.
Le pregunté si alguna vez le contó ese secreto a algún otro humano y le hizo ver que tan preciado es su estado en la vida, pero no me respondió, solamente se quedo sonriendo quieto. Luego de un rato razoné que era imposible que ese gato estuviera charlando conmigo y por eso, todo lo que me dijo era totalmente cierto.

14 de julio de 2012

Realidad confusa.

Mis pies flotaban en una nube esponjosa mientras mis brazos eran acariciados por una brisa tan reconocible. Mi nariz pudo sentir su aroma, era parecido a cuando una flor está por morir, que entrega todo su esplendor antes de su final atroz. También olía a pasto recién cortado, arrancado de sus raíces. A tierra mojada, ahogada en su propio llanto. Poco a poco esa brisa se convirtió en un líquido muy poco espeso, tenía un color extraño, entre azulado y verdoso. Mi boca se atrevió a dar un sorbo de ese extraño líquido. Para mi sorpresa, sabía a sangre fresca y miel recién recolectada. No pude definir si me disgustaba o no, pues al segundo, se transformo en sólido. Mis ojos estaban drogados por la luz proveniente de la nube cual me sostenía, por lo que no me impresionó que tuviera un color que no reconocía bien. Luego de sentirme segura en esta nube, de tomarla como un hogar, desapareció. Caí precipitadamente al suelo y me encontré con la cruda realidad.
Me ví sentada en la mitad de una calle rodeada de edificaciones, negocios, y gente que se me acercaba para ver como me encontraba. Me había desmayado. Tambíen habia visitado el lugar más cómodo que podía recordar. Cuando una mujer pregunto sobre mi estado, le dije ''Estoy mal, quiero volver a mi inconciencia''..

11 de julio de 2012

Te quiero a vos.

Quiero que alguien me acepte tal cual soy. Sin maquillaje, con mis arrugas, mis granos en la frente, sin peinarme, sin arreglarme, con mis orejas deformes, recién despierta, en pijama, en jogging y en soutien, con o sin brakets.

Necesito alguien que ame mi sonrisa limpia tal cual es, que me diga que soy hermosa cuando no lo intento ser, que acepte mis idas y también mis vueltas, que me abrace cuando lo necesito y cuando no, que me bese sin importar mi aliento ni mis labios partidos, que le guste mi cuarto ordenado y más desordenado, que camine conmigo de mi mano, que se saque fotos conmigo y las acepte lindas o feas, que me de cariño todos y cada uno de mis días, que me deje pensar en él todo lo que mi cuerpo ansíe, pero más que nada, que no me tenga rencor.

Ansió a alguien que me pueda entender, en el que me encuentre reflejada tal cual soy, que su alma sea la mitad de la mía.

¿Alguna pista más? Solo te quiero, necesito y te ansío a vos.